

Ecuador logró revertir la situación de los menores y ese es un «avance fundamental» porque significa que la poliomielitis, sarampión y rubeola «ya no son una amenaza en la salud». Así lo expresó Luz Ángela Melo, representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef por sus siglas en inglés) en Ecuador.
Ayer, jueves, José Ruales, ministro de Salud, presentó los resultados de la “Campaña Nacional por un Ecuador libre de poliomielitis, sarampión y rubeola”, que se ejecuta desde mayo de este año.


El Secretario de Estado calificó a los resultados como positivos: 95 de cada 100 niños menores de 12 años recibieron la vacuna. Esto quiere decir que el 95% del grupo objetivo que estaba conformado por alrededor de 3,4 millones de menores de ese rango etario recibieron inmunización. La vacunación estaba prevista para 100 días, pero se cumplió en 91.
Durante una rueda de prensa ofrecida en Quito, Melo alertó sobre las altas cifras de niños que no reciben dosis de anticuerpos: 67 millones de menores no fueron vacunados entre 2019 y 2021.
La situación es más delicada si se toma en cuenta que América Latina y el Caribe tenía una sólida tasa de inmunización. No obstante, con la pandemia, se convirtió en una de las regiones del planeta que redujo drásticamente la inmunización rutinaria, retrocediendo al menos 30 años.
«En 2021, uno de cada cuatro niños de la región no había recibido vacunas vitales y más de 1,7 millones de niños no había recibido ninguna vacuna».
Ángel Díaz, representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS/OPS) también aplaudió por los resultados de la campaña e indicó que esta movilización garantiza estándares de salud en la población.
Despliegue de personal y de recursos
La inversión para esta campaña fue de $ 23 millones que se emplearon en vacunas, insumos, equipos de cadena de frío, talento humano y otros.
Más de 100.000 personas entre trabajadores de la salud y personal de universidades y otras instituciones formaron parte de las brigadas para visitar a 15.900 unidades educativas y más de 6.000 centros de cuidado y desarrollo infantil públicos y privados.
Además, se visitaron más de 500.000 viviendas con brigadas de 20.000 personas dentro del monitoreo rápido de vacunación.


Para llegar a la población se realizaron visitas en equipos del Ministerio de Salud Pública (MSP) y Organización Panamericana de la Salud (OPS) que se movilizaron en los 221 cantones del país.
La visita a los domicilios, principalmente, consistió en solicitar la presentación del certificado de vacunación para confirmar si el menor tenía al día sus vacunas. En caso de no contar con el documento se requirió la información para su respectiva validación.
Si bien los resultados son alentadores, el Ministerio de Salud anunció que la vacunación se extenderá hasta el 31 de agosto de 2023 con lo cual se pretende llegar al 100% de la cifra objetiva.