Verónica Herrera
Ingeniera en Gestión Turística y Medio Ambiente. Máster en Intervención Social en las Sociedades del Conocimiento. Especialista en Turismo
Esa ha sido una pregunta que me ha retumbado en la cabeza por mucho tiempo. Hace 18 años no tuve la valentía de darle una respuesta a este profesor que hizo gala de su machismo más arraigado.
No quiero imaginar cuantas mujeres que estudiaron turismo tuvieron que soportar comentarios inadecuados de docentes que no entendieron que la base de esta profesión está en la diversidad, la inclusión, el entendimiento entre culturas y en establecer medios para alcanzar la paz.
Y bueno, no se puede dejar de lado datos de la Organización Mundial de Turismo (OMT) que indican que a nivel mundial las mujeres representamos el 54% del total de fuerza laboral que trabaja en la industria, en el ámbito académico quienes estudian y enseñan turismo la mayoría somos mujeres, muchos proyectos de turismo comunitario en el mundo están liderados por mujeres que han buscado la mejora de los niveles de vida por medio del empoderamiento e inclusión de sus compañeras a estas iniciativas turísticas.
Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la Organización de Naciones Unidas (ONU), está enfocado a la igualdad de género y asegura que por medio del turismo sostenible se pueden crear puestos de trabajo digno y desarrollar el potencial de las mujeres, además que es una herramienta de reducción de desigualdades y puede ayudarlas a alcanzar la independencia financiera y a salir de situaciones de violencia intrafamiliar en algunos casos. Y me olvidaba el papel importantísimo que las mujeres tenemos en la conservación del patrimonio cultural inmaterial y del medio ambiente gracias a nuestra capacidad para transmitir estos saberes a las nuevas generaciones.
Por lo tanto, hoy más que nunca es primordial al momento de la reactivación del turismo post covid-19 la inclusión en las políticas de Estado a las mujeres que se encuentran directamente relacionadas al sector, realizar políticas públicas que aseguren su inclusión, reducir brechas laborales y salariales además de garantizar que tengamos las mismas oportunidades. No podemos re-pensar el turismo sin mujeres.
Y un recordatorio para todos “igualdad de género no es poner el mismo número de hombres y mujeres a trabajar” es asegurar las mismas oportunidades bajo las mismas condiciones para todos. (O)