Actualmente, Ecuador es dueño del 100% de la producción petrolera del campo Sacha operado por Petroecuador. Esto cambiará una vez que se firme el contrato de delegación, bajo la figura de participación, con el consorcio privado SINOPETROL que, de acuerdo con los términos de la negociación explicada por las autoridades, se llevará el 87,5% de la producción mientras el Estado se quedará con el 12,5% cuando el precio del barril de crudo se ubique hasta $62 por barril.
Cuando el precio suba a $120, la transnacional recibirá el 80% y el Estado el 20% y, si el precio del crudo baja de los $30, la empresa se llevará el 81% de la producción y el Estado el 19%.
La suscripción del contrato podría concretarse en tres semanas, según la ministra de Energía, Inés Manzano, quien no lo firmará pues delegó esa tarea al viceministro. Lo que sí firmó, enfatizó, es un pedido a Contraloría para que audite la suscripción y el proceso de adjudicación con lo cual, quedaría sellado cualquier proceso de control a futuro.
Además, el gobierno recibirá como “prima” $1.500 millones como condición para suscribir el documento de cesión. No se especificó con claridad el uso que tendrán esos recursos que estarían disponibles para el régimen a finales de este mes.
El ministro de Economía, Luis Alberto Jaramillo, aseguró que esta es una negociación beneficiosa para el país sin embargo no entregó cifras que demuestren su afirmación.
