El doodle de hoy recuerda el nacimiento de Dolores Cacuango, la activista ecuatoriana que hoy cumpliría 139 años y quien pasó décadas luchando por los derechos de los pueblos originarios de su país.
Dolores contribuyó al establecimiento de las primeras escuelas bilingües de Ecuador, para que se enseñara el español y el kichwa, el idioma más utilizado en el Ecuador. Además, es una destacada referente de la izquierda y el feminismo de principios del siglo XX en Latinoamérica.
Esta activista incansable nació el 26 de octubre de 1881 en el latifundio de San Pablo Urcu cerca de Cayambe, localidad de la Provincia de Pichincha. Creció en el campo junto a sus padres y no pudo ir a la escuela debido a la falta de recursos económicos.
Cuando tenía 15 años fue obligada a trasladarse a Quito donde trabajó como empleada doméstica. Allí vivió de cerca los embates de la desigualdad y el racismo y se propuso luchar para lograr un cambio en la sociedad. Luchó por la justicia económica, derechos territoriales y educación para los pueblos originarios.
En 1926, ayudó a liderar a la gente de Cayambe para que lucharan contra la venta de sus tierras comunitarias, lo cual sentó las bases para futuros movimientos. En 1944, también contribuyó al establecimiento de la Federación Ecuatoriana de Indios, que unió a los pueblos indígenas en torno a cuestiones económicas y culturales.
«Somos como la paja de páramo que se arranca y vuelve a crecer… y de paja de páramo sembraremos el mundo», «A natural unidos como a poncho tejido, patrón no podrá doblegar”, “Esta es la vida, un día mil muriendo, mil naciendo, mil muriendo, mil renaciendo. Así es la vida», son algunas de las frases que la inmortalizaron.
Abogaba por un tratamiento igualitario del pueblo indígena ante la ley, igualdad de acceso y condiciones en materia de salud, educación y trabajo. Quería cambiar siglos de explotación y para eso contaba con un temple de acero y una capacidad discursiva única.
Y se centró en reivindicar las condiciones laborales de su pueblo, que era explotado en manos de un pequeño grupo de poder.
Murió el 23 de abril de 1971, a los 89 años. En la actualidad, una calle de Quito lleva su nombre, así como también la Escuela de Mujeres Líderes en Ecuador. Sus frases continúan siendo símbolos de lucha para el pueblo indígena ecuatoriano. (I)