El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, anunció este viernes 25 de octubre la suspensión de la jornada laboral del jueves 31 de octubre en los sectores público y privado. Según el régimen, la medida busca fomentar el turismo y dinamizar la economía durante el próximo feriado nacional por el Día de los Difuntos y la Independencia de Cuenca, que se extenderá del 1 al 4 de noviembre de 2024.
A través de un comunicado oficial, la Presidencia indicó que esta disposición tiene como objetivo apoyar al sector turístico en un momento clave del año. “En atención al sector turístico, el Gobierno ha dispuesto la suspensión de la jornada laboral del 31 de octubre para fortalecer la actividad económica”, se destacó en el mensaje.
Para el sector público, las ocho horas correspondientes al día suspendido se recuperarán a través de una hora adicional en los días laborables posteriores, según lo establece el Decreto Ejecutivo número 438. En el caso del sector privado, la medida es opcional y podrá aplicarse conforme a las normativas vigentes.
Durante el día de la suspensión, se mantendrán activos los servicios básicos y esenciales para la población, entre los que se incluyen salud, bomberos, terminales de transporte y servicios bancarios. Las autoridades de cada entidad pública deberán coordinar con el personal mínimo necesario para asegurar la continuidad de estos servicios.
Además, el Ministerio de Educación confirmó que las clases también se suspenderán en todas las instituciones educativas, tanto públicas como privadas, el 31 de octubre. La cartera educativa informó que esta jornada se recuperará conforme a los mecanismos establecidos para cumplir con los 200 días lectivos obligatorios en el calendario escolar.
Este anuncio representa una oportunidad para que la ciudadanía disfrute de cinco días de descanso. El feriado inicia el viernes 1 de noviembre, fecha en la que se traslada la conmemoración del Día de los Difuntos, que tradicionalmente es el 2 de noviembre. La Independencia de Cuenca, celebrada el 3 de noviembre, se trasladará al lunes 4, completando así el período de feriado.
El presidente Noboa ha implementado otras medidas de incentivo turístico, como la reducción del IVA durante los feriados de noviembre, con el objetivo de estimular el consumo en hoteles, restaurantes y negocios relacionados. Estas decisiones buscan posicionar al país como un destino atractivo tanto para turistas nacionales como extranjeros.
Con esta disposición, el Gobierno ecuatoriano busca no solo promover el turismo, sino también dinamizar sectores relacionados que han sido afectados por la pandemia y el contexto económico actual.
Incrementan los cortes de energía en Ecuador afectando a ciudadanos y sectores productivos
En las últimas semanas, Ecuador ha experimentado un aumento en los cortes de energía en varias provincias, lo cual ha generado preocupación entre la ciudadanía y afectado a sectores clave de la economía. Estas interrupciones del servicio eléctrico se han intensificado principalmente en zonas urbanas y rurales, impactando tanto a hogares como a negocios y a la producción industrial y agrícola.
La Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) y otras empresas distribuidoras han señalado que estos cortes se deben a una combinación de factores, entre ellos la disminución de la generación hidroeléctrica, afectada por la reducción de lluvias y problemas de mantenimiento en ciertas centrales. Según un informe de la entidad, esta situación ha obligado a implementar restricciones de carga en varias regiones del país.
Uno de los aspectos que agrava la situación es el impacto de la sequía en las principales fuentes de energía hidroeléctrica, como el embalse de Paute, cuya producción se ha reducido significativamente. La falta de inversión en infraestructura y el mantenimiento retrasado de las centrales también han contribuido al incremento de las interrupciones, según especialistas del sector.
Desde inicios de octubre, provincias como Guayas, Manabí, Pichincha y Azuay han reportado apagones programados y no programados de hasta 14 horas diarias en algunos casos, afectando especialmente a zonas comerciales y productivas. Comerciantes y empresarios han manifestado su preocupación, ya que los cortes han causado pérdidas económicas por la paralización de sus actividades y el riesgo de deterioro de productos perecederos.
La situación ha llevado a que el Gobierno de Daniel Noboa y las autoridades del sector energético planteen medidas de emergencia. En los últimos días, se ha hablado de incrementar la importación de energía desde países vecinos, como Colombia y Perú, para reducir la dependencia de la generación hidroeléctrica y suplir la demanda en el corto plazo. Sin embargo, esta solución ha sido criticada debido a los altos costos que implica.
Por otro lado, desde el Ministerio de Energía se han anunciado proyectos de inversión en energías alternativas, como solar y eólica, aunque expertos señalan que estos proyectos tardarán años en ofrecer un alivio real. En este contexto, se han intensificado los llamados para mejorar la infraestructura eléctrica nacional y buscar alternativas que permitan mitigar los efectos de fenómenos climáticos como la sequía.
Mientras tanto, la ciudadanía ha mostrado su descontento por las interrupciones en el servicio y los problemas de comunicación que enfrentan las empresas eléctricas al no informar con anticipación sobre los horarios y duración de los cortes. La situación es especialmente crítica para hospitales y centros de salud, los cuales deben asegurar el suministro eléctrico para evitar afectaciones en sus servicios.
El aumento de los cortes de energía ha puesto de manifiesto la urgencia de una gestión más eficiente en el sistema energético ecuatoriano. En tanto no se resuelvan los problemas estructurales, los apagones seguirán siendo un reto constante para el país. (I)
