El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, dispuso mediante el decreto 490 el traslado de la vicepresidenta Verónica Abad a Turquía como consejera temporal para las relaciones económicas entre ambos países. Abad deberá asumir esta función antes del 27 de diciembre de 2024.
Esta decisión se da tras el fallo de la jueza Nubia Vera, quien levantó la suspensión de cinco meses impuesta a Abad por el Ministerio de Trabajo, argumentando que la vicepresidenta no está sujeta a la Ley Orgánica del Servicio Público (LOSEP) al ser una autoridad electa y parte del servicio exterior. Vera señaló que la única entidad con competencia para juzgar a Abad es la Asamblea Nacional. Además, ordenó la restitución inmediata de su cargo, el pago de sus salarios atrasados y disculpas públicas de la ministra de Trabajo, Ivonne Núñez.
Por su parte, Núñez anunció que apelará la resolución judicial. Abad, quien había sido suspendida por un supuesto abandono injustificado de sus funciones diplomáticas, calificó las acusaciones como una persecución política.
El ministro de Gobierno, José de la Gasca, señaló en rueda de prensa que el gobierno acatará la resolución judicial, aunque añadió que mediante decreto ejecutivo se le asigna a la vicepresidenta «como única función especial y temporal colaborar con las relaciones económicas del Ecuador con la República de Turquía».
En ese mismo espacio, el ministro reiteró que en tiempos de campaña electoral no cabe una sucesión de Abad a Noboa. «Ella no tiene nada que hacer en la Vicepresidencia, sino que tiene que presentarse en Turquía hasta el 27 de diciembre». La sentencia que la restituye en su cargo señala que «en virtud de que se ha observado la vulneración de los derechos constitucionales a la tutela judicial efectiva, la seguridad jurídica, el debido proceso, las garantías básicas y la aplicación de norma y derechos de las partes» se dispone dejar sin efecto la resolución del Ministerio de Trabajo y dar «cumplimiento inmediato».
Tras el fallo, Abad intentó ingresar a la sede de la Vicepresidencia en Quito, pero encontró vallas y una fuerte presencia militar que le impidieron el acceso. Ante esta situación, acudió a la Unidad de Flagrancias, ubicada en el centro norte de Quito, donde presentó una queja.
Al salir, declaró a la prensa que aún no ha recibido notificación oficial sobre su misión en Turquía. «Esto es una vergüenza ante la comunidad internacional. Soy la vicepresidenta constitucional del Ecuador y no se me permite cumplir con mis funciones», manifestó Abad, quien también afirmó que no permitirá ser amedrentada.
La relación entre Noboa y Abad, ambos empresarios y con poca experiencia política, ha sido tensa desde su elección conjunta en 2023, situación que se ha agravado con este reciente episodio.
Abad ha sostenido que el objetivo del gobierno ha sido presionarla para que renuncie y evitar la sucesión presidencial. Esta figura es clave para Noboa, quien deberá solicitar en enero una licencia para la campaña electoral con miras a los comicios presidenciales de febrero de 2025, donde aspira a la reelección. Según la Constitución, la sucesión presidencial le corresponde a quien ocupe la Vicepresidencia. (I)