
Verónica Herrera
Ingeniera en Gestión Turística y Medio Ambiente. Máster en Intervención Social en las Sociedades del Conocimiento. Especialista en Turismo
Estamos a menos de un mes de elegir al presidente y a los asambleístas, es el momento cumbre donde como ecuatorianos decidimos quienes van a dirigir nuestra vida política y económica durante los siguientes cuatro años.
Ahí radica la importancia de elegir con inteligencia porque serán cuatro años en los que se dónde tendremos un presidente y una asamblea que deberán decidir distintas políticas públicas enfocadas en salir de esta profunda crisis económica y la crisis política gracias a la corrupción que se encuentra profundamente arraigada en todas las instancias del gobierno.
Votar con inteligencia es no dejarse llevar por el video del bailecito a lo “el bromas”, el disfraz de viuda en fin de año, el terminator y así varios ejemplos que, aunque nos parezcan graciosos lo único que logran es llamar la atención y no transmitir propuestas claras, lógicas, medibles y que lleguen a cumplirse. Ojo no estoy abogando por ningún candidato.
Seamos conscientes de que lo único que nos sacará de la crisis son gobernantes capaces, honestos y con un profundo entendimiento de la realidad del país. Ecuador es un país lleno de oportunidades y de una extensa riqueza natural y cultural que no está siendo aprovechada como medio para alcanzar el tan anhelado desarrollo económico y social. No aprovechamos esa riqueza para atraer inversión porque no somos un país que ofrece una verdadera seguridad jurídica a inversionistas. Hemos tenemos gobernantes que cambian de opinión a la mitad del camino y ahuyentan al empresario dispuesto a invertir.
Revisemos las propuestas de campaña, estas elecciones son la oportunidad de generar un verdadero cambio, que vean que los votantes ya no somos los mismos que hace cuatro años, que no nos dejamos llevar por el más carismático, el que se ve mejor en la foto, el que sabe cantar o el que ofrece dinero o empleo a cambio de un voto. Hoy más que nunca seamos votantes conscientes, seamos votantes inteligentes.