Con motivo del Día de Difuntos, Quito Turismo y la Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE) han organizado el concurso “Colada Morada y Guaguas de Pan: Tradición, Sostenibilidad y Sabores”, que tiene abiertas sus inscripciones hasta el 21 de octubre. El evento busca honrar una de las tradiciones gastronómicas más emblemáticas del Ecuador, en la que las guaguas de pan y la colada morada son protagonistas.
La colada morada, una bebida espesa y de intenso color púrpura, se elabora con frutas andinas como el mortiño y especias que evocan los sabores de la Sierra ecuatoriana. Las guaguas de pan, por su parte, son panes en forma de figuras humanas que simbolizan a los difuntos, unidas históricamente a rituales funerarios prehispánicos y a las festividades católicas de Todos los Santos. Esta tradición combina la espiritualidad y el sabor, ofreciendo una oportunidad para que las familias ecuatorianas se reúnan en torno a una mesa de memorias y sabores.
Los establecimientos culinarios del Distrito Metropolitano de Quito pueden participar en el concurso, que culminará el 31 de octubre, durante el Festival Más Allá de la Vida, en el barrio La Tola. Se premiará a los mejores exponentes de la tradición, destacando aquellos que logren una preparación con técnicas innovadoras, sostenibles y que resalten la trazabilidad de los ingredientes.
Este evento resalta no solo la preservación de las costumbres locales, sino también su adaptación al contexto contemporáneo. Además, se reconoce la importancia de la promoción digital de la gastronomía con un premio especial al video promocional que obtenga más «likes» en Instagram, incentivando a los participantes a integrar la tradición con la modernidad.
La tradición de las guaguas de pan en Ecuador tiene profundas raíces culturales. En tiempos precolombinos, las culturas andinas utilizaban figuras de pan como ofrendas a los muertos en rituales ancestrales, práctica que se adaptó con la llegada de los españoles y el sincretismo religioso. En la actualidad, el Día de Difuntos se ha convertido en una mezcla de lo sagrado y lo festivo, donde la comida juega un papel central para recordar a los que ya no están.
Esta competencia culinaria pone en valor estos aspectos históricos y actuales, al tiempo que promueve la sostenibilidad en la gastronomía. Con el uso de ingredientes locales y prácticas respetuosas con el medio ambiente, los participantes contribuyen no solo a mantener viva la tradición, sino a fortalecer su impacto en el futuro.
El evento, que involucra a restaurantes, hoteles y cafeterías de Quito, resalta también la importancia de la colaboración entre instituciones locales como Quito Turismo y la Universidad UTE. Ambas entidades buscan no solo preservar las costumbres, sino también involucrar a la comunidad en la apreciación y adaptación de la tradición culinaria.
Este tipo de iniciativas permiten que Quito no solo celebre el Día de Difuntos, sino que también renueve sus lazos con su herencia cultural, promoviendo el turismo y la sostenibilidad. Con ello, se refuerza el lema: «¡Con turismo, Quito renace!» (I)
