Armas, municiones, drogas, licor y hasta electrodomésticos. Las requisas ejecutadas al interior de las cárceles del país, evidencian un serio problema en los filtros de seguridad.
Eso se observa cada vez que se realizan estos operativos dentro de los centros penitenciarios. Este jueves, 12 de julio, se llevó a cabo un operativo de control en la Cárcel El Rodeo, en Portoviejo (provincia de Manabí), que tiene una capacidad de 1.400 reos.
La diligencia se efectuó entre 1.000 efectivos de la Policía Nacional y 800 agentes de las Fuerzas Armadas. El Servicio de Atención a Personas Adultas Privadas de Libertad (SNAI) a través de su cuenta de Twitter, detalló que servidores del Cuerpo de Vigilancia Penitenciaria también apoyó en los controles.
El operativo se ejecutó como medida de control. Para ello, los internos del centro reclusorio fueron evacuados a los patios, donde se los ubicó sentados, mientras el personal de la fuerza pública extraía todos los objetos prohibidos. Simultáneamente, se realizaron sobrevuelos en la zona, como medida de seguridad.
En las intervenciones no solo se encontraron drogas y armas al interior de las paredes, sino, además, 45 televisores, 150 parlantes de música, 65 ventiladores, 63 terminales móviles, 25 congeladores, 6 radios motorolas, entre otros objetos.
El delito de ingreso de objetos prohibidos está tipificado en el artículo 275 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) que determina una pena privativa de libertad de uno a tres años.
El operativo se ejecutó después de que el domingo se encontraron ahorcados cuatro reclusos. El caso está bajo investigación por parte de la Policía y de la Fiscalía.
Autoridades del SNAI advirtieron que habrá más intervenciones de esta categoría, pero no indicaron de qué forma se ingresan estos objetos.
