El rechazo a la explosión de un auto en una unidad militar en Colombia y dudas sobre la afirmación de considerarlo un atentado, ocupan amplio espacio este día en las redes sociales, particularmente en Twitter.
El ministro de Defensa colombiano, Diego Molano, a nombre del gobierno rechazó y repudió “este acto terrorista y vil que buscó atentar contra los soldados de Colombia”, que aconteció el martes 15 de junio.
A pocas horas del incidente, señaló que la “hipótesis inicial es que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) está detrás de este acto demencial y vil”.
Advirtió, además, que “también es materia de investigación” la “involucración” de las disidencias del Frente 33 de la ya extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
El hecho tuvo lugar a la 15:30, hora local, en el interior del cantón militar San Jorge ubicado en el barrio San Rafael en Cúcuta, cuando un vehículo de color blanco, parqueado en el lugar detonó al menos dos veces.
Sin embargo, luego del análisis del video de la explosión colgado en Twitter, las dudas sobre la idea de que se trate de un ‘coche bomba’ se viralizan.
“Expertos en explosivos: Cómo se explica que reviente un carro bomba y la camioneta que está al lado junto con el poste estén intactos. Lo más sospechoso es la rapidez con la que el gobierno culpó al ELN. Nos meten miedo para vendernos seguridad”, expresó el internauta Indignados Colombia.
Asimismo, el usuario de esta plataforma SARGENTO(RA)EJÉRCITO NACIONAL DE COLOMBIA, explicó que en el video se ve el humo negro de la pólvora cuando se está quemando y después sucede la explosión.
Recalcó el militar retirado que el estallido de un coche bomba es limpio y pidió no engañar al pueblo colombiano.
Espacios perdidos
Para el abogado Alberto Ortiz Galind, cualquier juego pirotécnico o caldero que explote en estos tiempos de desespero del oficialista partido Centro Democrático, lo van a tratar de convertir en un carro bomba o acto terrorista para tratar de recuperar espacios políticos perdidos.
Por su parte GLM señaló que hay que recordar los falsos atentados que hubo antes y durante el mandato de Álvaro Uribe. Su meta era sembrar el terror para así él presentarse como el Mesías.
Las dudas también recaen en la ‘facilidad’ con la cual entraron a la unidad militar los perpetradores del supuesto atentado.
El presidente Iván Duque llegó al lugar anoche, y advirtió que redoblarán la ofensiva ‘contra estos execrables hechos y quienes apelan al crimen enfrentarán la contundencia del Estado y la justicia.
“A nuestros héroes, policías y soldados, todo el respaldo”, dijo Duque y ofreció una recompensa de 500 millones de pesos colombianos (unos 135 mil 208 dólares), “por información de los responsables del cobarde atentado terrorista a la Brigada 30 del Ejército de Colombia”. (I)
