Por Fabricio Cevallos
En Ecuador, donde las injusticias, el maltrato, el irrespeto a los derechos humanos y las leyes son el pan de cada día, siento que las acciones de las instituciones frente a ese tipo de casos han sido escasas, por no decir nulas. Sola una entidad ha tenido la valentía, entereza y las agallas para, en medio de un escenario políticamente complejo, exigir respuestas a esos temas que nos han lastimado como sociedad, me refiero a la Defensoría del Pueblo, y a la cabeza el Dr. Freddy Carrión.
En varias ocasiones, he comparado a la Defensoría del Pueblo con una isla en medio de un gran océano, parecería estar así, sola, buscando respuestas a una serie de temas y casos que necesitan una explicación y que ninguna otra entidad, a pesar de ser su obligación, ha sido capaz de hacerlo.
Sucedió con el polémico Plan de Vacunación, tema en el que el Ministerio de Salud, el Gobierno central, la Fiscalía y la Contraloría debían ofrecer explicaciones, pero el silencio les ganó, el desinterés y la falta de acción les superó, allí no hubo ninguna respuesta, fue la Defensoría del Pueblo, la única entidad del Estado ecuatoriano, la que demandó transparencia, pidió explicaciones y exigió que se rinda cuentas sobre un tema que al país, de forma general, ha indignado.
Pero no ha sido el único tema en el que la Defensoría del Pueblo ha tenido una acción decidida y firme, lo ha hecho también con la demanda de recursos no pagados a los gobiernos autónomos descentralizados, con el retorno a clases presenciales en 77 instituciones educativas del país, con los trabajadores de la empresa EXPLOCEN C.A. que han permanecido en huelga por más de siete meses, con la inseguridad que se vive en el sistema carcelario, con el trato discriminatorio contra la población en situación de movilidad humana, con la solicitud de medidas cautelares para exigir transparencia en la liquidación de Medios Públicos y así, podríamos seguir mencionando varios casos más.
La presentación del “Informe de la Comisión Especial para la Verdad y la Justicia” sobre los hechos ocurridos en octubre de 2019 fue un tema que avivó más la postura amenazante de varios sectores que ven a la Defensoría del Pueblo como a un enemigo, increíblemente así es, en nuestro país exigir claridad y respuestas a temas que lo merecen, es interpretado como un atentado al status quo.
Solo para poner en contexto, es necesario recordar que dicho informe NO fue elaborado por la Defensoría del Pueblo, sino por una comisión integrada por personas con corrientes ideológicas que podrían ser consideradas opuestas al correísmo, y menciono esto porque hay voceros, “líderes de opinión”, y representantes de distintos sectores que buscan deslegitimar esa labor, señalando una supuesta cercanía de quienes elaboraron el informe con el exmandatario Rafael Correa, argumento falso y sin sustento. Para que quede claridad, los integrantes de la comisión son Sybel Martínez, defensora de DDHH y permanente crítica del gobierno de Correa; Juan Carlos Solines, experto en telecomunicaciones y también cuestionador del gobierno anterior, y Xavier Zavala Egas, quien fue parte del Consejo de Participación Ciudadana Transitorio.
Insinuar además que el Defensor del Pueblo responde a intereses del correísmo es algo que sus detractores tendrán que probarlo, de forma argumentada. Lo cierto es que el Dr. Freddy Carrión fue nombrado por aquel Consejo de Participación Ciudadana y Control Social transitorio, el que saltándose la Constitución “reorganizó” el país, aquel Consejo transitorio con Julio César Trujillo a la cabeza, responsable del caos institucional que vive Ecuador.
Sin dejar de lado estos elementos, lo que se puede decir es que el Dr. Carrión, y la institución que preside, ha dado muestras de estar de lado de la ciudadanía, de la gente que demanda respuestas inmediatas sobre temas importantes, por eso es condenable y completamente reprochable que una autoridad como el Defensor del Pueblo reciba amenazas a su integridad personal y física por cumplir efectivamente su labor, esas amenazas en contra de él y de su entorno familiar deben ser rechazadas por todos quienes estén cansados del abuso y la prepotencia, del odio y del desinterés que ciertas autoridades han intentado imponer en este país, durante los últimos años.
Solidaridad desde el Colectivo de Periodismo Público Ecuador con el Dr. Freddy Carrión, y le animamos a que siga luchando por la defensa y protección de los derechos del pueblo ecuatoriano.